lunes, 18 de mayo de 2009

Necroilógica

Hagamos un trato, compañera,
sellado con hierro y seda:
no nos desprendas por pares
si te parece, cruel damisela,
de quienes llenaron sus venas
de amor, música y poemas
y supieron con su sangre
rebosar también las nuestras.
primero te llevas al músico;
tras él nos arrancas al poeta.
¿A qué aferrarse entonces
cuando la inspiración se queda soltera?
¿Acaso pretendes jodida
que la musa radiante se muera?
porque ella sin genios no existe
y también viceversa.
Ahora escuálida, poco o nada se alimenta
y con semblante taciturno
desfallece por la pena,
de saber que sin remedio
a trabajos forzados la condenas.

4 comentarios:

Bea dijo...

Hola, david.
Me encanta el poema, de verdad. Ya sé que eso es lo típico, lo que siempre se dice, pero te puedo asegurar que estoy completamente de acuerdo con todo lo que en él expresas. Es increíble la fuerza que transmites, la pasión que se ve reflejada entre los versos, el afecto con el que escribes cada palabra, la intensa emoción que une cual lazo las letras... Me ha llegado muy adentro, sobre todo la parte en la que dices que primero se nos va el músico, después el poeta, y que qué vamos a hacerle porque la inspiración se ha quedado soltera. Pero en definitiva, quiero decirte que me gusta mucho tu forma de escribir y de expresarte, y que me ha parecido muy bonita tu forma de homenajear a estos dos grandes artistas.
Un beso, y a ver si me haces un soneto para mi cumpleaños.

David dijo...

Hola Bea: ante todo gracias por comentar. Me alegro de que te haya gustado. Lo del soneto no te lo puedo prometer, pero lo intento. ¿Vale? Ahora me paso por tu blog y mojeteo un poco. Un abracito de oso.

margaritas dijo...

Hola.
A mí también me gusta mucho el poema, pero ojalá no lo hubieras tenido que escribir por sus muertes. De todas formas, ellos han dejado su huella y esa es la única manera de no morir nunca.
Lo siento, pero te voy a dar un abrazo lleno de tristeza... Cómo me afectan estas cosas...

Anónimo dijo...

eh